Todos hemos leído, escuchado y prácticamente vivido, el evidente cambio en los modelos de negocio y de mercado, que nos demanda afinar nuestra capacidad analítica para poder identificar qué puntos de nuestra operativa de negocio hasta la fecha, deben de ser adaptados, corregidos, modificados o directamente erradicados, para dejar paso a nuevos enfoques que nos permitan seguir compitiendo.

Avanzamos y nos planteamos cada vez más el valor neto de una respuesta, si es viable que en plena revolución tecnológica, de desarrollo de negocios online, nuevas formas de comunicarnos con el cliente, de acceder a él, de presentarle nuestros servicios y mantener sus contratos, todavía algunas firmas pueden permanecer al margen de estas realidades.

Ser competitivo se convierte en sinónimo de obtener la respuesta proactiva, prospectiva y adaptada en tiempo real a cualquier estrategia.

Preguntamos a una empresa tecnológica como Oticel Sistemas, aprovechando que cumplen 10 años en el mercado, qué es lo que argumenta su existencia dentro de cientos de clientes y les ha dado el éxito en esta década de vida.

Sacamos como conclusión que NO ha sido a base de ceñirse de forma genérica en dar soluciones de renting informático, servidores icloud, diseños web, cloud back up, o mantenimiento informático, sino que la clave de su éxito, se argumenta mediante la integración y capacidad de fomentar y supervisar cada una de las estrategias tecnológicas de sus clientes.

Estar detrás de cada elemento; el valor de la respuesta adecuada y adaptada ¿Cuánto tiempo ahorra, coste aminora y credibilidad genera tener solucionada cualquier incidencia en tiempo real? Y si no es posible ¿Cuánto supone para cualquier usuario que su proveedor tenga capacidad de dar respuesta presencial en sus instalaciones en tiempo record y profundizar en la incidencia hasta solventarla para que el negocio no pare y la imagen de marca no se resienta ante sus clientes?

Según Carlos Celdrán, socio fundador de Oticel Sistemas:

“El éxito o ventaja de nuestro modelo no es acudir cuando la situación ha hecho crisis y es necesario ponerse a bucear para encontrar el origen de la incidencia, dilapidando tiempo de reacción y convirtiendo el coste económico, tecnológico y reputacional en una realidad.

La clave de nuestra alta tasa de permanencia de clientes, tiene su origen en la capacidad de actuar de manera concreta en la incidencia, localizada de manera prematura, gracias a que nuestro trabajo empezó mucho antes de que cualquier incidencia se materializara.

Nuestro trabajo comienza colaborando activamente en la configuración de la estrategia informática, su aplicación y mantenimiento, para que sea una realidad tener monitorizado todo el proceso y sus componentes, llegando de manera más rápida a diagnósticos que nos capacitan para ofrecer una respuesta coordinada y concreta.”